Mi particular homenaje a esa fuerza interior que algunos llaman fe y otros llaman esperanza.33 mineros salvados finalmente por el constante y rítmico esfuerzo de una rueda, la rueda de su fortuna.
Hombres grandes, de espíritu grande, trabajadores grandes que hacen de Chile un pueblo unido y grande. Felicidades Chile y gracias por darnos tal ejemplo de entereza y humanidad.
